Un camino a medio emprender (17)

Al final ellos tenían razón, el error era mío. Todavía no te fuistes, no te querés ir, te dí el pase de ida para jamás volver, pero seguís molestándome tanto como yo lo deseo.
Quizás, quizás no. Sos una enfermedad, una enfermedad tan amarga y tan dulce, aún en una tarde como la de hoy, llena de humedad, nubes grises, calor y goteada.
Quizás no me entiendan pero el tema viene por ese lado. Hoy al fin lo logré, levité, vole, nade por los aires y fui feliz como un niño con su juguete nuevo
Quizás fue el momento de dominación de mente mientras dormitaba perfecto. Quizás fue sólo un sueño. Hay quienes dicen que el alma puede ser separada del cuerpo en vida, pero no conocía a nadie que lo halla logrado.
Aunque en la madrugada de ayer, lo logré, o pienso haberlo logrado. Mataderos a mis pies y debajo de ellos, sobre mi cabeza el cielo gris, tan nublado y a punto de lloviznar al igual que en la vida real.
Pataleando lentamente, caminando como el hombre en la luna, floraba y nadaba lentamente por los aires, haciendo posible ese sueño tan poco logrado.
Ahora me pregunto ¿Será esto parte de mi cambio filosófico de vida, será simplemente un sueño, o será que me estoy volviendo loco?
El camino está delante mío, hoy lo puse en claro en mis titilantes pensamientos. Mediante Marta Báez, estoy aprendiendo cuestiones irrelevantes y desequilibradoras de mis nociones cotidianas.
Estar muerto, estar vivo, seguir soñando, seguir durmiendo, seguir corriendo, seguir descansando, seguir creyendo, seguir esperando, seguir pensando, seguir amando, seguir construyendo, seguir derrocando, seguir cayendo, seguir mirando.
Es una tristeza que nuestro camino sea delimitado por un principio y un final. El final quizás lo pueda convertir en eterno, y así quede en la mente del lector y conocidos impregnado en sus mentes para siempre.
Pensar solo que estos escritos, mis escritos, sean publicados algún día, tomen fama, se estudien en facultades y escuelas. Quizás como libros de estudio, quizás solo como una historia. Mi historia, que contaré en otro emprendimiento más adelante.
Imagínensen al menos, a algún antepasado de ustedes, muchas generaciones atrás. No tienen ni idea de él, quien fue, y si hizo algo productivo en esta vida, además de elastilizar los lazos familiares por medio de la procreación¿ Les gusta eso? ¿ Es realmente lo que quieren?
Ser parte de esta jaula, de este momento, de esta prisión. O, ser alguien más, ser alguien que no desaparezca sino en esencia por miles de años, y quizás más.
Ya conocemos a algunos que duraron mucho: Jesucristo, Aristóteles, Dioses egipcios, personas y más personas. Nos llegaron por escritos, esculturas, culturas, tradiciones iguales de distintos lugares, pinturas y diversos descubrimientos.
Si tan solo un acontecimiento catastrófico derrive esta comunicación, esta globalización masiva. Si tan solo volviéramos a ser tan ignorantes sin la comunicación, que en tiempo más, no tengamos idea de como construir una red ferroviaria, de como crear una prensa hidroeléctrica, de crear un electrodoméstico, etc.
Volviésemos atrás, aunque siguiésemos adelante con nuestras vidas. Generaciones posteriores no conocerían ni a la mitad de los personajes famosos de la historia, y ésta nunca jamás hubiese vuelto a ser estudiada, contada, ni investigada.
¿ Hace falta tanto filosofía? Como para estudiar mi carrera de Contador Público. Como ser parte de una materia aparte y no parte de la história simplemente.
Esta materia, nunca divida entre el filosofar y la historia filosófica, sino unida en un camino, "la filosofía". Enseñar a filosofar, sin tener que hacer mérito de esta palabra, sino amar el estudio y el saber como más fácil y sin rodeos. Enseñar a soñar, a pensar, a cuestionarse dudas, situaciones, elementos, pensamientos equivocados, etc. Y no rondar en sí, a los distintos terminos y caminos de la filosofía.
El origen histórico comienza en Grecia cierto, el filosofar mucho antes; mejor dicho, el dudar, investigar e indagar la pasión por saber mucho antes.
¿ Por qué complicarnos con las suposiciones de viejos autores? ¿ Por qué estudiarlos, si hasta los propios profesores son concientes de las grandes afirmaciones falsas que muchos de ellos promulgaron en sus respectivas épocas?
Al igual que con otras posturas personales, veo en claro la publicidad en este hecho. Los dedicados profesionalmente como profesores de filosofía desde antes de mis tiempos, no han sido reemplazados por nuevas medidas de estudio o intereses, y creo aún, que falta mucho para que eso ocurra.
Compárenlos con los sofistas sino, quienes cobran por sus enseñanzas, mientras que en su otro parecido, los profesores contemporáneos, no se animán a darse el lujo de llamarse filósofos, porque no lo son, son simples personas como vos, como yo, pero dedicadas a enseñar y cobrar por sus enseñanzas. Aunque como contradicción, no se puede englobar y encerrar a un mismo y total conjunto de gente dentro de una bolsa. Hay quienes tienen amor por la investigación y facinación por la historia filosófica, y quienes tienen amor por enseñarla, y junto a este deseo, la posibilidad de subsistir mediante lo que a uno le gusta realizar.
Por eso, los hay de todos y en todo sentido, pero creo que la filosofía, debe ser solo parte de la historia, como un capítulo más.
Somos el mundo antiguo, de eso no hay duda, pero podemos crear nuestro propio mundo nuevo y joven, como en aquellos tiempos lejanos. Solo haría falta arreglar lo que rompimos, respetar al prójimo debidamente, aportar a esta era una cultura nueva, y no estar arraigados al pasado, construir un futuro nuevo entre todos a partir de una nueva historia y no reconstruir viejas posturas y quedarse hundidos en el pasado. Pasado pisado, futuro por pisar!!!




Alumno de la U.N.La.M
8/02/2005